Usa un Paño de Microfibra Limpia suavemente las lentes y la montura con un paño de microfibra limpio y seco para eliminar el polvo, las huellas y las manchas sin rayar.
Enjuaga con Agua Tibia Antes de limpiar, enjuaga tus gafas de sol con agua tibia para eliminar partículas abrasivas como arena o suciedad que podrían rayar las lentes.
Aplica Jabón Suave Usa una gota de jabón suave o limpiador para lentes para eliminar grasa o suciedad difícil. Frota con los dedos con cuidado y enjuaga bien.
Seca con un Paño Suave Seca con pequeños toques usando un paño de microfibra o sin pelusa para evitar marcas o residuos. No uses toallas de papel ni ropa, ya que pueden rayar.
Evita Productos Químicos Fuertes Nunca uses alcohol, acetona ni limpiadores domésticos. Estos productos pueden dañar tanto la montura (especialmente si es de acetato) como las lentes (como las de nailon o policarbonato).
Guárdalas Correctamente Conserva siempre tus gafas de sol en un estuche protector cuando no las uses, para evitar rayones, dobleces o daños.
Consejo: Una limpieza regular no solo mantiene tus gafas impecables, sino que también ayuda a conservar el recubrimiento de las lentes y su claridad óptica.
